Historia

Los primeros documentos que reflejan su existencia, son de 1.098, contando 9 viviendas en 1.495. Banastás quedó prácticamente destruída durante la Guerra Civil, fue reconstruido tras la guerra por el Servicio de Regiones Devastadas, agrupándose el conjunto en tomo a una plaza porticada con pequeño jardín central y la parroquial de San Andrés.

A principios de los 80 se convierte en foco expansivo de la capital oscense, transformándose totalmente el paisaje urbano, cercado por viviendas unifamiliares de variado diseño y volumen y edificios de Anjosa (industria de paraguas y sombrillas). Fue villa desde 1094 hasta 1189, adquiriendo en esta fecha la categoría actual de lugar.

En su casco urbano se ubica una fábrica de paraguas única en toda la provincia, dedicada también a la fabricación de sombrillas y toldos de playa. El mote les viene de la prosperidad de que gozan sus habitantes, calesa es el coche de los ricos.

Vista de Banastás

Imágenes de la Guerra Civil

Durante casi toda la Guerra Civil, el Carrascal de Banastas se configuró en un frente bélico muy importante en el denominado “cerco de Huesca”.

La fotógrafa húngara Kati Hornan realizó en 1937 una serie de fotografías que actualmente se encuentran depositadas en el Ministerio de Cultura.